Ejecutan segunda etapa del proyecto Ganadería Familiar Resiliente

La Comisión Nacional de Fomento Rural (CNFR) y el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) comenzaron la segunda etapa del proyecto Ganadería Familiar Resiliente, financiada por la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (Fiiapp) y el Instituto Nacional de Carnes (INAC). El proyecto tiene como objetivo mejorar la resiliencia a la variabilidad y el cambio climático de los sistemas ganaderos familiares basados en el uso de campo natural, mediante la implementación de buenas prácticas ganaderas validadas científicamente.

Continuación del proyecto

En esta segunda etapa, el proyecto continuará trabajando con los 45 predios que participaron en la primera fase del proyecto. Estos predios se encuentran en las sierras del este y en la zona de basalto del norte del país, que son regiones agroecológicas más vulnerables a los impactos de la variabilidad y cambio climático.

Uno de los principales problemas que enfrentan estos productores es la baja productividad, expresada en kilos de carne por hectárea, con importantes fluctuaciones interanuales debido a las prácticas de manejo implementadas.

Co-innovación y asistencia técnica

Para abordar esta problemática, cada predio recibe asistencia técnica agronómica y veterinaria basada en la metodología de co-innovación, que busca hacer un diagnóstico, identificar los problemas y rediseñar el manejo del predio en conjunto con la familia. Esta metodología se enfoca en medir los cambios en los niveles económico, ambiental y social del sistema.

INIA, que trabaja hace 20 años bajo el enfoque de co-innovación, capacitó a los 10 técnicos de campo asignados por el proyecto para trabajar con las familias y asegurar la correcta aplicación de esta metodología. Además, el instituto respalda el asesoramiento brindado a los predios con conocimiento científico y soluciones tecnológicas aplicables a la ganadería de cría, familiar y en campo natural.

Resultados de la primera fase

En la primera fase del proyecto, se logró mejorar el porcentaje de preñez (+8%) y la altura media del pasto (+30%) de los sistemas ganaderos familiares. La adopción de las buenas prácticas ganaderas evolucionó de un 30% a un 62%, contribuyendo a los resultados mencionados.

Para ampliar el alcance del proyecto, en esta segunda etapa se desarrollará una aplicación donde los productores podrán registrar datos del predio y recibir información y lineamientos para su correcto manejo, con el objetivo de llegar a más productores además de los 45 involucrados y sus organizaciones de base.

«En estos años la evidencia muestra que, rediseñando los sistemas de producción y mejorando el manejo, se puede aumentar y estabilizar la productividad, sin dañar el ambiente y mejorando los ingresos y la calidad de vida de las familias», explicó el Ing. Agr. Alfredo Albín, investigador de INIA.

Salto, 29 de marzo de 2023

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