
Aunque para algunos la palabra trazabilidad sea un problema, el mundo camina hacia prendas de vestir que garanticen el cuidado del medio ambiente y los animales. Uruguay tiene una larga y enriquecedora historia en el tema trazabilidad, partiendo de la base que fue el primer país en el mundo de trazar individualmente sus ganados desde el campo al plato del consumidor.
En este caso la empresa estadounidense de ropa masculina Wool & Prince y sus filial de ropa femenina Wool&, informó al comienzo de este mes de abril que las piezas de la nueva colección lanas merino de ambas marcas, cuenta con trazabilidad desde “Ashmore”, cerca de Kingston en la costa sureste del estado australiano.
Esta lana proviene de AJ & PA McBride, familia productora de lana en el sur de Australia durante más de seis generaciones, que celebró su centenario en 2020. Esta firma provee de 800 fardos de lana merino de 17 micras, de alta calidad y amigables con el medioambiente. La empresa es uno de los cinco principales productores de lana de Australia, y cada año esquila más de 230.000 ovejas y corderos y produce más de un millón de kilogramos de lana.
Para lograr la trazabilidad de dicha lana, Wool & Prince y Wool& han trabajado en forma conjunta con The Woolmark Company, donde se busca al mismo tiempo brindarle información al consumidor del origen y el impacto de cada prenda.
En un viaje de 12 meses a lo largo de la cadena de suministro, la lana merino de ‘Ashmore’ se procesa en China, se transforma en prendas en Corea y luego se distribuye a través de los Estados Unidos para finalmente llegar a Wool & Prince y a Wool&, para ser comercializadas a clientes de todo el mundo.
La colección de prendas trazadas de Wool & Prince incluye una gama de polos y sudaderas versátiles de punto elaboradas con lana merino, mientras que la colección de lana de Wool& incluye una gama de vestidos versátiles para el día a día.
Salto, 16 de abril de 2021
