Tras la confirmación de un nuevo brote de greening en Santa Catarina, el estado brasileño de Rio Grande do Sul intensificó sus medidas de prevención para proteger la sanidad de sus plantaciones de cítricos. El greening, también conocido como HLB, es una enfermedad altamente destructiva que afecta a los cítricos y es transmitida por el psílido «Diaphorina citri». Desde el primer foco detectado en 2022 en Xanxerê, SC, el estado gaúcho implementa un plan de contingencia con monitoreo y fiscalización constante.
Entre las acciones clave figuran barreras fitosanitarias en puntos estratégicos fronterizos con SC y Paraná, como Torres, Vacaria, Barracão y Marcelino Ramos. Además, se refuerzan los controles sobre mudas y cargas procedentes de otras regiones. Entre septiembre de 2024 y marzo de 2025, se instalaron 384 trampas en 77 municipios, con monitoreos quincenales, sin que se detectaran casos positivos hasta el momento, lo que mantiene a Rio Grande do Sul como área libre de la plaga.
También se implementó la Instrucción Normativa Nº 14/2024, que regula el ingreso de mudas y materiales propagativos de los géneros «Citrus, Fortunella y Poncirus», exigiendo autorización previa del Departamento de Defensa Vegetal. Para la ingeniera agrónoma Maria Luíza Conti, esta normativa mejora la seguridad del productor y fortalece el control del tránsito vegetal, aspecto clave para prevenir la diseminación del greening en el estado.
Salto, 23 de abril de 2025